Si todos los días nos proponemos a disfrutar de las pequeñas cosas que la vida nos regala, desde la brisa del viento, algún aroma de cocina, una caricia, una canción, un gesto, un perdón, tantas cosas que podemos disfrutar y no nos damos cuenta porque el tiempo sabe borrar esa esencia.
Uno vive apurado por cosas que no tienen mucho sentido, nos pasamos metidos en el teléfono sin ver el alrededor. Sin ver aquello que quizás nos haga mas feliz o nos llene un poquito mas el alma.
Haz las pequeñas cosas con muco amor, pero del amor mas lindo.
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